viernes, 15 de noviembre de 2019

¿Por qué me cuesta tanto aprender a leer el Tarot?

Hace algún tiempo decidí volver a hacer clases de Tarot, algo que había dejado de lado porque sentía yo que la gente no estaba dispuesta a hacer el esfuerzo que según yo implicaba aprender (perdónenme, era muy joven 😓😅 y ya sé que el problema obviamente no eran las personas, era la profesora 😂). Y claro, volver ahora después de tantos años (cerca de 10) con una perspectiva más amplia me ha ayudado a darme cuenta de algunos problemas que no dependen ni de los profesores ni de los alumnos, sino de la cultura esotérica latinoamericana que aun no se decide si comprende el Tarot como un ejercicio subjetivo, rico para relacionarse con uno mismo y a través de eso con el mundo; o, como un ejercicio donde los poderes psíquicos son lo que mandan y se trata de qué tanto le "achuntes". Esa ambivalencia confunde a los que recién empiezan, y les hace pensar que debe haber algo malo en ellos, que quizá son estúpidos o simplemente no tienen lo necesario.


Así que quiero decirte que el problema no eres tú, no es que tú no tengas talento, ni tampoco es que hayas llegado tarde a la repartición de intuición, la intuición la tienes, te lo aseguro 100%. Te digo con toda seguridad que el Tarot lo puede aprender cualquier persona común y corriente (nada más corriente que yo), a algunos les costará más y a otros menos, pero todos pueden con el trabajo apropiado y con persistencia.

Entonces ¿Qué necesitas para aprender a leer el Tarot?

Pues un cerebro (con una mente abierta), un tarot, y disposición a equivocarte y seguir practicando como si no hubiera un mañana. Nada más.

Pero si ya tengo todo eso ¿por qué no lo logro?

Hay varias problemas que te pueden estar afectando y aquí no los voy a nombrar todos, pero uno de las más fundamentales puede ser que esperas encontrar un método que sea La Verdad, cual Biblia que baja del cielo inspirada por Dios, eterna e infalible, que te asegure que sabrás con toda seguridad lo que va a pasar y nunca te equivocarás. Pues, amig@, si es eso lo que te pasa (y piénsalo bien, que a veces no nos damos cuenta) ya te digo que puedes esperar sentad@.

A pesar de que hay un montón de autores que intentan venderse a sí mismos como elegidos, cuyo sistema único e irrepetible viene a rescatar el Tarot de la ignominia en la que lo han puesto todos los otros ignorantes (los otros ignorantes somos todos los demás), la verdad histórica es que el tarot fue creado para jugar naipes, y hemos sido los seres humanos los que lo desarrollamos, juntos, a lo largo del tiempo, para hacerlo la increíble herramienta esotérica, artística, psicológica y mágica que es hoy.

Entonces, si no hay una verdad, ¿cómo sé que lo estoy haciendo bien?

Te lo dirán las personas y lo verás en tu día a día. Con práctica te irás soltando, e irás desarrollando un método, aprendiendo de cada experiencia y de cada comentario. Te cuesta porque no es fácil, no te compares con los demás, tú eres una persona diferente y tienes tus propios tiempos. Si de verdad te gusta esto, persevera, porque como dice el dicho el que persevera alcanza. Un gran abrazo.





miércoles, 6 de noviembre de 2019

Chile: Nuestra torre.

Soy chilena.
Escribo esta entrada con dos objetivos, uno es el de expresarme como cualquier otr@ compatriota, y el otro, es responder a una pregunta que dio vueltas y que de hecho, más de alguien me hizo:

"Si el tarot es tan bakán (genial) ¿por qué no les dijo lo que iba a pasar?"

Es una pregunta válida, sin duda, y frecuente, también. Es común escuchar "si pudieran ver realmente el futuro serían ric@s". Otras personas, menos maliciosas y sarcásticas, sólo preguntan hacia dónde vamos ahora, en qué va a acabar todo esto. He visto más de alguna tirada en Internet que pretende resolver esa interrogante. No estoy en contra, si alguien quiere hacer el ejercicio, hágalo y nos cuenta. He respondido en algunas lecturas sobre los destinos personales de mis consultantes y para mí misma, pregunté si era aconsejable dejar el país, pero sobre el destino de la Nación no he preguntado. Hace mucho tiempo que dejé de mirar al futuro, sólo veo el presente, porque si no entendemos el presente y el pasado, no tenemos herramientas para cambiar el futuro.

Las naciones son entes vivos, conformados por miles o millones de personas que como células cumplen una función en su sociedad. El igual que no me siento capaz de dar un diagnóstico médico, no me siento capaz de diagnosticar a esta larga franja de tierra en la que nací. Puedo hacer un análisis de su vida espiritual, que de hecho lo hice más de alguna vez en mi perfil personal, con palabras que ahora parecen premonitorias. En clave de Tarot, Chile ha transitado por los últimos 30 años entre el colgado y el diablo: hemos sostenido un sistema que nos ahoga (colgado), haciéndole cambios que nos permitieron mantener un equilibrio (muerte+templanza) pero que no solucionaban nada, más bien eran aprovechados por algunos para aumentar el abuso (diablo). Un día, un grupo de estudiantes que llevaban años marchando, protestando y tomándose su colegio sin ser escuchados, decidieron a modo de protesta, entrar todos juntos al metro y saltar los torniquetes para usar el servicio sin pagarlo. Incluso se grabaron. Se les quitó importancia, porque ellos no están en el sistema: no trabajan, no pagan impuestos y por lo tanto se dijo que representaban la típica rebelión de su edad y pensaron que se les iba a pasar cuando crecieran. Lo sé porque soy apoderada de ese colegio, mi hijo se graduó este año de la educación media allí.

Pero se equivocaron.

Esa fue la chispa que encendió la yesca social que venía acumulada. Ese fue el rayo de nuestra torre.

La torre es una carta muy bella, porque representa el cómo el sistema interviene para ponernos en vereda cuando no logramos evolucionar por nosotros mismos, como una madre que regaña a su hijos cuando hace mal, pero deja el proceso de reconstrucción en nuestras manos. Una marcha de un millón y medio de personas es una estrella, sin duda, no obstante, también tenemos muchas lunas: entre violaciones a los DDHH, incendios y delincuencia común que se aprovecha del pánico, hemos visto las sombras de nuestro pueblo y de nuestros gobernantes.

¿Llegaremos a encontrar el Sol? ¿llegaremos a una autoconsciencia como pueblo? Quizá. estamos batallando por encontrar la claridad y no caer en el orgullo y la autocomplacencia.

Si alguien me pregunta por qué el Tarot no lo advirtió, diría que sí lo advirtió, lo advierte diariamente, cada vez que alguien toma un mazo de cartas para leerlo. La única diferencia es que lo hace desde el individuo. Todos pasamos por este mismo proceso, a nivel individual. Nos quedamos en un trabajo que no nos hace felices, con una pareja a la que no amamos, nos justificamos para no resolver los problemas con nuestras familias y para alejarnos de nuestros amigos y así, cuando todas las células están enfermas, el cuerpo entero colapsa, el sistema te manda un mazazo para que digas "¡diablos! algo tiene que cambiar".

No sé lo que va a pasar con certeza. Sólo espero que este proceso nos ayude a dar un paso más en nuestro crecimiento como país, que lleguemos a ese Mundo para que se nos abra una nueva puerta en el ciclo de la vida.